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El envejecimiento trae consigo una modificación del metabolismo con importantes requerimientos en el gasto energético.
Por ejemplo, se producen modificaciones en la composición corporal que se suelen relacionarse con malnutrición.
Los factores de riesgo y las patalogías asociadas a la alimentación son las siguientes:
La nutrición y el cáncer
La nutrición y el cáncer
Alimentación y demencia
Enfermedad de Parkinson
Nutrición, depresión y ansiedad
Otros factores de riesgo
La nutrición y el cáncer
Patología gastrointestinal
Patología respiratoria
Patología cardiovascular
El cáncer es una enfermedad que afecta mayoritariamente a la población mayor en el que la nutrición juega un papel fundamental.
El síndrome metabólico conlleva a un augmento del riesgo de diabetes mellitus tipo 2 de eventos arterioscleróticos cardiovasculares. Los componentes de la diabetes son: hiperglucemia, hipertrigliceridemia, niveles bajos de colesterol HDL, obesidad central e hipertensión arterial.Y los factores relacionados con la el síndrome metabólico son: los malos hábitos dietéticos y el estilo de vida sedentario. Por eso, para su prevención, se recomienda la modificación de los hábitos de vida, reducciónn de la ingesta calórica, seguir una dieta saludable y practicar ejercicio físico. Y se recomienda la dieta mediterránea.
Las demencias traen consigo un deterioro intelectual cognitivo y son consideradas una de las causas más frecuentes de discapacidad y dependencia en el envejecimiento. Ciertas modificaciones nutricionales en la dieta pueden prevenir el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas.
Es la segunda enfermedad neurodegenerativa más frecuente. Varios pacientes con esta enfermedad mostraban pérdida de peso o sobrepeso. El tratamiento se asocia con una mayor calidad de vida.
Son considerados como una de las amenazas de la sociedad moderna actual. Existe una relación bidireccional entre depresión - ansiedad y nutricion. Estas personas tienen mayor discapacidad física, dependencia y menor calidad de vida.
Otros factores de riesgo de igual importancia son los trastornos de la conducta alimentaria en la persona mayor, la osteoporosis, la fractura de cadera, la menopausia y la postmenopausia, la enfermedad celíaca y la sensibilidad al gluten no celíaca, el estrés oxidativo y el sistema inmune.
En las personas mayores puede presentarse mediante diversas entidades clínicas como las que afectan al Tracto Urinario Superior en forma de Enfermedad Renal Crónica y en Insuficiencia Renal Aguda. La patología vesical y prostática tienen una menor relación con los aspectos nutricionales.
Es habitual que, con la edad, los procesos digestivos sean más lentos, algunas secreciones gastrointestinales estén disminuidas y el tránsito intestinal sea menor. Afectando, de forma negativa, en la digestión y absorción de macro y micro nutrientes. Esta población está en riesgo nutricional "per se".
La EPOC es la patología respiratoria crónica más frecuente. Su prevalencia aumenta con la edad. Entre las causas se encuentran la desnutrición por ayuno, la multimorbilidad, la sarcopenia o la fragilidad.
Se trata de la principal causa de muerte prematura en Europa. Contribuye al incremento del gasto sanitario. Se ha comprobado que el tipo de dietas consumidas en distintas poblaciones se ha relacionado con enfermedades diversas. En este caso, se evidencia una estrecha relación de la dieta con los eventos cardiovasculares. Se recomiendan alimentos como las frutas, las verduras y los cerales integrales. También, el aceite de oliva, los pescados y los frutos secos.